Cada día, nos despertamos con el maravilloso y rico aroma del café, el cual nos provee un suave empujón para sobrevivir a las prisas matutinas. En la tarde, cuando nuestros cuerpos comienzan a cansarse, buscamos el te para calmar nuestras tareas diarias. Esas tan necesarias infusiones de energía ayudan a mantener nuestros cuerpos en marcha. ¿Pero que sucede con nuestras mentes? ¿nuestros espíritus? ¿Cómo les damos el estimulo que necesitan para mantenerse inspirados, enfocados y alegres?
En Café Inspirador y Té de la Sabiduría: Delicias Diarias en el Café Divine, el reverendo Peter Vu ofrece su respuesta en una colección de mensajes inclusivos, edificantes y llenos de sabiduría. Para cada día del año hay dos citas que provocan la reflexión, junto con una interpretación corta y alentadora de cada uno, para impulsar nuestro estados de animo, alegría y sentido del propósito.
Independientemente de quienes somos y de donde venimos, todos somos parte de una familia humana, y si ponemos aprender a ayudarnos unos a otros, no solo nuestro mundo se convertirá en un lugar mas amable, sino que también nos sentiremos mucho mejor acerca de nosotros mismos. Café Inspirador y Té de la Sabiduría proporciona el plano para esa reconexión, enseñándonos a afinar nuestra personalidad y convertirnos en mejores personas- sin importar a donde nos lleve el día.
Acerca del Autor
Mi nombre es Rev. Peter G. Vu, y he sido un sacerdote catolico de la Diocesis de Grand Rapids, Michigan, por veinte años. Naci en la ciudad de Saigon (actualmente Ciudad Ho Chi Minh), Vietnam. Era un niño cuando termino la Guerra de Vietnam. Fui testigo de la Guerra y del final de ella con horror y profunda apreciacion por la paz. Tuve que crecer con el Sistema de gobierno cumunista y soportar muchas dificultades con ellos durante mas de una decada. Lo que me ayudo enormemente a mi y a muchos de mis compatriotas durante esos dias oscuros fue nuestra fe y nuestras oraciones. Por lo tanto, mi amor por las oraciones y meditaciones fue capaz de florecer. . ademas, pude aprender e intercambiar nuevas ideas de oraciones y meditaciones con muchos de mis amigos budistas. Nos llevábamos bastante bien a pesar de nuestras diferentes tradiciones de fe.
